jueves, 26 de junio de 2014

Proposición indecente

Déjame proponerte un juego. Un fracaso.
Un error del que te arrepentirás bastante. 
Una ilusión malgastada en alguien que ni la merecía ni la necesitaba. 
Un tropiezo constante, sin expectativas de mejora. Eso.

Prometo que volverás a creer. 
Rezarás por que no acabe nunca, pero reclamarás su muerte. 
Te hará disfrutar. Mucho. 
Te hará volar alto, donde no verás cigüeñas, y te enterrará tan hondo
que tu corazón se volverá granito. No tendrás término medio.

Echarás de menos su belleza.
Su tacto, su olor, su mirar. 
Te parecerá deleznable.
Sus manos, su cuerpo, sus ojos.
Exigirás una respuesta y olvidarás por qué jugaste al juego.

Tan solo déjame hacerlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja aquí tu comentario...