martes, 2 de septiembre de 2014

"Permíteme pensar mal"

Piensa todo lo mal que desees. Y no es una orden, es más bien un derecho. Estás en tu derecho a pensar mal de mí, a no fiarte. Incluso sería una locura por tu parte no hacerlo. Es más, lo prefiero. Prefiero que no te fíes de mí.


Por eso te aconsejo que no te fíes si te propongo invitarte a una cerveza, puede que quiera emborracharte. Lo más seguro es que quiera hacerlo y, si me dejas, lo conseguiré. No te fíes de mí si en algún momento te quiero coger de la mano, ni se te ocurra. Quizá no te quiera soltar nunca más. Quién sabe. Y sobre todo, no te fíes si algún día te dijo que te quiero, porque con total seguridad te puedo decir que no dudaré en hacerlo.


Te permito pensar mal, cualquiera lo haría. Incluso yo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja aquí tu comentario...